Conoce nuestra fábrica

Más de medio siglo de tradición, sabores auténticos y pasión por la cecinería artesanal.

Nuestra fábrica, una hermosa tradición e innumerables historias en 55 años

Grandes maestros cecineros han pasado por sus instalaciones, dejando cariño, conocimientos y, sobre todo, una profunda pasión por el chancho a la chilena y la elaboración de productos artesanales.

Con el tiempo, nuestra fábrica se hizo famosa por la venta de prietas recién cocidas. Muchas clientas – que aún lo recuerdan – llegaban con sus propias ollas para comprarlas, listas para servirlas fresquitas en la hora de almuerzo. Eran otros tiempos, en los que se exhibían cabezas de chancho aliñadas, tan frescas y calientes que el vapor impregnaba el local con un inconfundible aroma casero.

Incorporar tecnología sin perder el valor de lo artesanal

Los tiempos han cambiado, ¿quién podría negarlo? Con ello, también nos hemos enfrentado a múltiples desafíos: incorporar tecnología sin perder el valor de lo artesanal, implementar sistemas de gestión de calidad e inocuidad, cumplir con nuevas exigencias normativas nacionales e internacionales y, sobre todo, preparar continuamente a las siguientes generaciones de maestros cecineros.

Todo con un solo gran objetivo:
Mantener el sabor, la calidad, la higiene y la inocuidad que nuestros clientes y consumidores merecen.

Nuestro desafío es conservar las tradiciones

Hoy, en un mundo digital donde la velocidad de los cambios nos abruma, queremos ofrecer una pausa, un descanso en torno a la buena mesa. Buscamos transmitir, a través de sabores y aromas, la sensación de viajar a otra época: aquella que nuestros padres y abuelos nos relatan cada vez que nos reunimos para compartir.